Mil millones de desplazados en 2050 de continuar la deforestación y el cambio climático


+ Destacan el estrecho vínculo entre la sobreexplotación de los bosques, el cambio climático y los impactos sociales negativos, como conflictos, hambrunas y epidemias

San Miniato, (Pisa), 8 de marzo de 2019.- "Si los gobiernos continúan la demora en adoptar medidas urgentes para detener el cambio climático, para el año 2050 deberán enfrentar la migración de mil millones de personas", revela un estudio realizado por el Club di Roma, el cual fue el centro de los discursos en el segundo día de sesiones del XV Foro Internacional para la Protección de la Naturaleza, de Greenaccord.
Lo que podría convertirse en la diáspora más grande de la historia de la humanidad es causada por el calentamiento global y los fenómenos climáticos extremos que genera.
Estos eventos, explicó el periodista finlandés-canadiense de la red Greenaccord, Kaarin Rugiero, “se han triplicado desde los años 80: inundaciones, tormentas, tifones, corrientes de aire y olas de calor extremo no son solo problemas climáticos, pues también han tenido un enorme impacto social y provocará una emergencia global de conflictos, hambrunas y epidemias”.
"Por eso debe enfrentarse al cambio climático como un riesgo existencial inmediato", explicó Jinfeng Zhou, secretario general de la Fundación China para la Conservación de la Biodiversidad y el Desarrollo Verde.
“Actualmente, las emisiones registran una disminución insuficiente para una acción de mitigación climática, por lo cual debe intervenirse de inmediato y detener el uso de los combustibles fósiles. En China, se han introducido restricciones para los vehículos que utilizan combustibles fósiles, al tiempo que se presiona para usar más energías renovables, como la eólica y la solar”.
En el segundo día de trabajos, se presentó una imagen clara de las condiciones de las áreas verdes del Mediterráneo. "Es una zona crítica cuando se monitorea la progresión de los cambios climáticos", explicó la profesora Scarascia Mugnozza, que enseña Ecofisiología Forestal en la Universidad de La Tuscia.

TURISMO DEPREDADOR
"El 30% del turismo mundial se concentra alrededor del mar Mediterráneo y contribuye peligrosamente a la explotación excesiva del paisaje", por lo cual los bosques “representan la infraestructura ecológica y verde más importante de la región, con 25 mil especies e importantes reservas de agua y suelo.
Además, los bosques pueden absorber 30 por ciento del dióxido de carbono (CO2) "y por eso debemos preservarlos y protegerlos, apoyándonos en la bioeconomía, que permite una gestión sostenible del capital natural del planeta".
Sin embargo, según un estudio de la FAO, solo el 15 por ciento de los bosques crecen al sur del mar Mediterráneo, y las cifras disminuyen en comparación con el aumento de bosques en las regiones del norte.
Los bosques del sudeste asiático también están peligrosamente bajo presión. Woro Supartinah, jefe de comunicación de la Red de Riau Forest Rescue, presentó datos sobre los pulmones verdes de Indonesia:
“Las turberas, que cubren más de 20 millones de hectáreas de tierra en Indonesia, son algunas de las más grandes del mundo y tienen una responsabilidad ecológica fundamental porque son reservas preciosas de carbono. Indonesia conserva el 57 por ciento de gigatoneladas de carbono debajo de sus bosques”, explicó el ecologista.
Los territorios africanos podrían estar en peores condiciones. En Kenia, la deforestación avanza al lado de las "dramáticas condiciones de pobreza que afectan especialmente a las mujeres", dijo Teresa Muthoni Maina Gitonga, de la International Tree Foundation.
“Kenia es el país con el menor porcentaje de bosques en África: sólo 7.2 por ciento del territorio está cubierto por árboles, pero más del 80 por ciento de su territorio está en desertificación. La International Tree Foundation lleva a cabo un ambicioso proyecto para plantar 20 millones de árboles en los bosques de Kenia”.

FALTA LEGISLACIÓN ADECUADA
A menudo, la protección del patrimonio forestal es una tarea difícil y compleja debido a la falta de legislaciones adecuadas. Es el caso de Rusia, donde "las leyes hacen que nuestro trabajo sea muy complicado y las organizaciones no gubernamentales (ONG) medioambientales no son bien consideradas", dijo Andrey Laletin, presidente de los Amigos de los Bosques de Siberia.
“En Siberia tenemos uno de los pulmones verdes de la Tierra, dijo, y los bosques ocupan 515 millones de hectáreas, 40 por ciento del territorio, y dan refugio a 20 poblaciones indígenas. Estos bosques crecen en el permafrost, pero el aumento de los accidentes forestales ha permitido que el metano se derrita, un gas treinta veces más peligroso en comparación con el dióxido de carbono”.
Revertir la tendencia es un esfuerzo duro pero necesario en todas las latitudes. La contribución del sector industrial es crucial, hoy más más que nunca; las empresas más innovadoras han tomado nuevos caminos, en el intento de borrar los errores del pasado.
"La sostenibilidad y los beneficios deben encontrar un punto de encuentro", dijo a los asistentes al Foro Valeria Bracciale, del Departamento de Innovación y Sostenibilidad de Enel. “Nuestro CEO se esfuerza en integrar cada vez más los negocios con la protección del paisaje y el patrimonio natural. Para tener éxito, se debe trabajar con las comunidades locales en la salvaguarda de la biodiversidad”.

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